Un grupo de arqueólogos de la Universidad Católica del Perú halló más de cien puntas de lanzas hechas de piedra que aproximadamente tienen unos 12 mil años de antigüedad. El hallazgo se dio en el sector Pampa Lechuza en el desierto de Ica, unos 350 kilómetros al sur de Lima.
“Las puntas paiján (como se denominan a este tipo de puntas) provienen del período que va entre el 10000 a.c. al 7000 a.c. y se encuentran en la costa, desde Piura hasta Ica”, señaló Jalh Dulanto a un diario local. Dulanto es el líder de este grupo de siete arqueólogos que realizó el hallazgo.
En la zona del hallazgo se desarrollaron las primeras civilizaciones de la región, tal y como lo demuestran los más de 15 mil restos hallados por arqueólogos.
Aunque los especialistas aún no han sometido las puntas de lanzas a métodos de fechado como el carbono 14, la comparación con restos similares permite validar su antigüedad.
De acuerdo a Ruben García, jefe de Patrimonio Arqueológico Inmueble de Ica, este hallazgo es trascendente pues se trata de la evidencia más antigua sobre los habitantes de esta región sureña.
Dulanto encabeza el equipo de arqueólogos de la Universidad Católica que investiga Pampa Lechuza, 250 kilómetros al sur de Lima, en la región Ica. El investigador indicó a EL PAÍS que han recolectado y registrado más de 20.000 objetos de piedra, entre ellos herramientas de piedra tallada y desechos de talla, manufacturados, usados y abandonados por recolectores y cazadores. «Los primeros pobladores del antiguo Perú [vivieron] en una época en la que el desierto de Ica era menos árido».
Algunas puntas tienen 12 centímetros de longitud y otras son “miniaturas” de apenas un centímetro.
“Las miniaturas no son funcionales para cazar; no sabemos si eran rituales, simbólicas o si las hacían para entretenerse”, indicó la investigadora.
En ese lugar con costa en el Océano Pacífico se desarrollaron las primeras civilizaciones de la región, como lo demuestran los más de 15.000 restos hallados por arqueólogos.
Aunque los expertos aún no han sometido las puntas de lanzas a métodos de fechado como el carbono 14, la comparación con restos similares les permite validar su antigüedad.
Según el jefe de Patrimonio Arqueológico Inmueble de Ica, Rubén García, el hallazgo de Pampa Lechuza es “importante” porque se trata de la evidencia más antigua conocida sobre los habitantes de esta región sureña.